El Desafío de la Infraestructura Educativa en Colombia: Un Llamado a la Inversión
El Desafío de la Infraestructura Educativa en Colombia: Un Llamado a la Inversión
Por Juanita Lizarazo
En Colombia, es innegable el deterioro y las preocupantes condiciones de la infraestructura educativa en las escuelas y colegios públicos. Estas condiciones lamentables representan un obstáculo significativo que impacta directamente en la calidad de la educación, ya sea en la presentación de exámenes como el ICFES o las pruebas Saber. Además, estas condiciones también influyen en la felicidad y la permanencia de los estudiantes en el sistema educativo.
Mi experiencia me ha enseñado que la calidad de la educación depende en gran medida de las condiciones laborales de los docentes y su capacidad para innovar y mejorar los procesos educativos en el aula. Esta situación afecta las bases educativas sobre las cuales crecemos y nos convertimos en los futuros adultos que nuestra nación espera.
¿Pero cómo podemos esperar que los estudiantes prosperen si las escuelas, nuestros segundos hogares, no ofrecen el apoyo y la estabilidad integral que necesitamos? Esta es la realidad de la calidad de la educación en Colombia, donde los esfuerzos para medir la calidad de la educación se centran en tener docentes preparados y sistemas de evaluación estudiantil. Sin embargo, ¿Dónde quedan las condiciones físicas de las escuelas?
Necesitamos espacios verdes, restaurantes, bibliotecas, zonas deportivas, laboratorios, baños adecuados, aulas inteligentes y lugares para proyectos científicos y de música. También debemos prestar atención a las condiciones estructurales en las salas de profesores para nuestros maestros.
A menudo escuchamos a los gobiernos hablar sobre la importancia de invertir en la educación de los niños, ya que son el futuro de Colombia. Pero en la realidad, los recursos no llegan y son nuestros rectores, directivos, coordinadores y maestros quienes hacen malabarismos para continuar su labor diaria, incluso a pesar de la falta de agua, alcantarillado, luz y los peligros a los que se enfrentan.
Incluso en medio de situaciones de conflicto, las escuelas se ven afectadas y quedan completamente destrozadas después de los disparos. En las escuelas rurales, el transporte y el acceso a alimentos son problemas clave debido a las difíciles condiciones de vida de muchas familias.
Afortunadamente, el Gobierno Nacional ha tomado medidas con el Plan Nacional de Infraestructura Educativa, que busca construir miles de aulas nuevas. También se ha creado el Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa (FIE) para administrar importantes recursos. Sin embargo, surgen preguntas sobre quién se encargará del mantenimiento de las antiguas sedes educativas y de dónde vendrán los recursos necesarios.
Es importante recordar que la infraestructura y los recursos escolares inciden directamente en la calidad de la educación. Colombia cuenta con muchas mentes brillantes en sus escuelas públicas, especialmente en áreas rurales, que esperan una inversión de la comunidad, el extranjero o de nuestros gobernantes.
Es hora de un milagro de inversión extranjera o un compromiso sólido de nuestros líderes para abordar la problemática de la infraestructura educativa. Ya no debe ser una fuente de dolor, sino de esperanza y alegría para los niños de Colombia.
¿Y tú, qué estás esperando para aportar tu granito de arena a las futuras generaciones? La inversión en la educación es la inversión en el futuro de nuestro país.
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Fuentes
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